Una débil sonrisa se dibujó en sus labios, los cuales mordió en cuantos esos orbes achocolatados se encontraron con los propios que tímidamente se se desviaron a sus propios dedos que se enredan entre si, nerviosa por esa mirada traviesa.
¿Qué tiene él? Ese cabello rebelde y esa sonrisa débilmente torcida que al parecer, le dedicaba. La cual pudo apreciar por el rabillo de su ojo izquierdo.
¿Qué tiene él? La respiración de la castaña comenzó agitarse y cuando se atrevió a volver a verle, se encontró nuevamente con esa mirada que le transmite un cosquilleo electrizante que recorre en cada arista de su piel, la cual se duplica con cada paso que él da en dirección a ella.
¿Quién es él? Un hombre comprometido con alguien que no soy yo.